La operación consiste en la implantación de herramientas TIC para el fomento de la movilidad urbana asistida, como la sustitución de dispositivos acústicos existentes por otros con activación por bluetooth o mando a distancia, evitando el problema de la contaminación sonora; la sustitución de reguladores semafóricos obsoletos por otros de nueva generación que suponen un ahorro energético del 25%, permitiendo la conectividad de los reguladores con los diferentes actores de la movilidad urbana, transporte público, ciclistas, VMP, vehículos de reparto, particulares y con los peatones; así como dispositivos de tiempo de cruces para peatones, especialmente dirigido al colectivo de mayores y personas con movilidad reducida, aumentando la seguridad vial.