El CECI tiene como objetivo mejorar y desarrollar las políticas regionales a través de la promoción de la participación ciudadana en la economía circular. Los cambios en los patrones de consumo son esenciales cuando se trata de alargar los ciclos de vida del producto a través de la reutilización, reparación, remanufacturación y renovación, así como el ahorro de energía. Al mismo tiempo, la adopción de la economía colaborativa reduce la necesidad de nuevos productos y generación de residuos. En el proyecto, las Buenas Prácticas sobre la participación ciudadana se transfieren relacionadas especialmente con los servicios de economía compartida, por ejemplo, la biblioteca de herramientas/juguetes y los servicios de reparación. En CECI, ocho socios de seis regiones comparten un gran interés por intercambiar conocimientos sobre los servicios y la participación ciudadana en la economía circular. El contenido está en consonancia con los objetivos del paquete de la UE sobre la economía circular. A través del proyecto se desarrollará la cooperación local, regional y nacional. El CECI apoyará a las regiones para que desarrollen estrategias y soluciones de economía circular, en las que los ciudadanos desempeñen un papel clave. Las actividades incluyen un diálogo ciudadano a nivel local/regional, así como el desarrollo de capacidades interregionales para apoyar el impacto en los instrumentos políticos. Mediante el intercambio de buenas prácticas, las regiones asociadas estarán mejor equipadas para desarrollar sus planes de acción sobre participación ciudadana y servicios circulares. Los talleres temáticos bien preparados, las mesas redondas y las visitas al sitio constituirán la base para compartir conocimientos especializados e impulsar a los socios hacia el desarrollo conjunto de políticas. Como resultado del CECI, las regiones asociadas desarrollarán conocimientos sobre la importancia de los ciudadanos en la economía circular y adquirirán experiencia en la implementación de nuevas soluciones. Además, el CECI sensibilizará al público para crear una demanda de servicios sostenibles. Los cambios en los patrones de consumo crearán oportunidades comerciales de economía circular, crecimiento verde y empleo. Las buenas prácticas de los socios del proyecto se documentarán y compartirán para un uso más amplio de la UE a través de la Plataforma de Aprendizaje de Políticas.
