Esta intervención, con todos los cambios y mejoras que preconiza, busca garantizar un mínimo de condiciones para el funcionamiento de la escuela, garantizando la calidad, funcionalidad y comodidad, ajustadas a las exigencias del sistema educativo actual, a fin de aprovechar al máximo los valores existentes, interviniendo solo cuando sea estrictamente necesario para dignificar la institución escolar.