Su objetivo es valorar el patrimonio, histórico, artístico, técnico y material del Acueducto y sus elementos constitutivos a través de un estudio de tecnologías aplicadas, materiales, tipologías estructurales, diagnóstico y estado de conservación, posibilitando la intervención concienzuda, estableciendo estrategias y metodologías de intervención adecuadas al contexto cultural, arquitectónico y funcional, paralizando el proceso de degradación.